¿Qué puedo hacer para convivir con mi perro con leishmaniosis? Te damos todos los consejos

La esperanza de vida de un perro con leishmaniosis depende mucho de la etapa en la que se encuentra la enfermedad en el momento del diagnóstico, pero en la mayoría de los casos, si la infección se detecta en sus primeros estadios, puede llevar una vida relativamente normal. Para ello, es importante tener en cuenta los siguientes consejos: 

1. Visitas periódicas al veterinario  

Es imprescindible visitar al veterinario de manera periódica para tener un control tan exhaustivo como sea posible de la situación y disponer de un margen de tiempo para actuar si aparecen nuevos síntomas o recaídas.  

2. Seguir una buena alimentación y un nivel de ejercicio adecuado 

A pesar de que no es necesario cambiar su dieta de forma radical, debes proporcionarle herramientas para fortalecer su sistema inmunológico y mantener la enfermedad controlada. Es importante que su pienso sea rico en antioxidantes, Omega 3 y Omega 6, que las cantidades de fósforo que contenga sean reducidas y que tenga proteína de alta calidad y baja en purinas. 

3. Llevar una vida tranquila y sin estrés 

El tratamiento actual de la leishmaniosis no es curativo, por lo que el parásito no se elimina por completo del organismo y, pasado un tiempo tras finalizar el tratamiento, puede volver a aparecer la enfermedad. La probabilidad es más alta si el perro está sometido a cualquier tipo de estrés que baje sus defensas. Por ello, debe seguir las recomendaciones de su veterinario. 

4. Mantener la alerta antes, durante y después de los tratamientos 

Es fundamental para detectar si el animal muestra algún síntoma de recaída y así poder actuar lo más rápido posible. Para ello es importante conocer los principales síntomas de la leishmaniosis. 

5. Continuar con las medidas de profilaxis para evitar reinfecciones 

Existen una amplia variedad de productos para la prevención de la leishmaniosis en diferentes formatos como collares, pipetas o pulverizadores que proporcionan altos niveles de repelencia y que nos ayudan mucho con la prevención para evitar una nueva picadura del flebótomo, vector de la leishmaniosis.

Recuerda que ante la sospecha de que tu perro pueda tener leishmaniosis, es fundamental que acudas al veterinario cuanto antes para tratar la enfermedad. Aun así, no olvides que el mejor tratamiento a aplicar siempre es la prevención. También te recomendamos que, si quieres estar informado sobre cómo proteger la salud de tu perro, de seguirnos en Instagram y suscribirte a nuestra newsletter para estar bien informado.