Todo lo que debes saber sobre el flebótomo, el "mosquito" responsable de transmitir la leishmaniosis en perros

Como bien sabemos, el flebótomo es el encargado de transmitir la Leishmaniosis. Este "mosquito" transmite la enfermedad a través de su picadura, y no únicamente afecta a los perros, sino que también puede llegar a propagarla a humanos y otros mamíferos.

Nuestras ciudades ofrecen condiciones favorables para los flebótomos porque proporcionan temperaturas ambientales moderadas y estables durante largos periodos del año, y múltiples lugares donde vivir y reproducirse, con materia orgánica disponible para las larvas. 

En 2022, un estudio en roedores de parques y alcantarillas de Barcelona mostró presencia de flebótomos portadores de leishmaniosis en casi la mitad de las muestras tomadas, poniendo de manifiesto que esta enfermedad zoonótica no es exclusiva de animales de campo. Es decir, el flebótomo y la leishmaniosis está presente y activo en los principales núcleos urbanos.

El flebótomo, portador de la leishmaniosis

La leishmaniosis es una enfermedad parasitaria muy extendida y constituye un problema de salud pública en muchas partes del mundo. En España se reportan más de 300 casos al año, y las comunidades autónomas más afectadas son Valencia, Madrid, Cataluña y Baleares.

Si quieres saber más sobre esta zoonosis que porta el flebótomo, te recomendamos ver nuestro apartado de Leishmaniosis.

¿Dónde podemos encontrar al flebótomo?

Este insecto se encuentra especialmente en lugares con temperaturas moderadas, humedad relativa alta y materia orgánica. Debido al cambio climático, el flebótomo está colonizando zonas del norte de la península y de Europa, donde antes no existían casos. Además, el calor acelera su metabolismo, lo que incrementa su necesidad de alimentarse, aumentando también la necesidad de las hembras por obtener sangre, y por lo tanto, aumentar sus picaduras tanto en perros como en otros mamíferos y en personas. Algunos lugares donde puedes identificar la presencia del flebótomo serían:

• En grietas de edificios, garajes, sótanos
• En acumulaciones de materia orgánica: desechos vegetales o contenedores
• En lugares sombríos de parques y jardines
• Con animales cerca de los que alimentarse

¿Cómo podemos reconocer al flebótomo?

Es complicado tratar de identificar a un flebótomo puesto que es un insecto muy pequeño, solo se podría ver en detalle en un laboratorio. Igualmente, para ayudarte a detectar a este "mosquito", te dejamos estos rasgos a tener en cuenta:

• Son insectos muy peludos y pequeños, miden unos 2-3 mm de longitud.
• Los flebótomos emiten sonido al volar y lo hacen cerca del suelo, a la altura de nuestras mascotas. Vuelan lento (un metro por segundo) y a saltos. Se ayudan de paredes/muros para alcanzar mayor altura, pudiendo subir con facilidad dos y tres pisos desde la planta baja de las casas. 
• El ratio de dispersión del insecto es de 2 km aproximadamente. Suelen recorrer trayectos cortos (entre 50 y 300 metros), por lo que la actividad del flebótomo se restringe a los entornos donde se reproduce. Este ratio de 2 kilómetros es entonces también el ratio de riesgo de transmisión de la leishmaniosis.
• Están activos cuando las temperaturas diurnas y nocturnas sobrepasan los 16 °C. Por debajo de los 10° C las larvas entran en hibernación y los adultos se mueren, reduciéndose de este modo su población.
• Evitan las condiciones meteorológicas extremas como la lluvia y el viento.
• La actividad máxima del flebótomo es desde el atardecer hasta el amanecer. En sitios con escasa iluminación pueden permanecer activos todo el día.
• Las hembras necesitan alimentarse de sangre para completar el desarrollo de los huevos. La puesta tiene lugar unas 4-5 veces a lo largo de su vida (máximo 4 semanas).
• Viven y se reproducen en lugares cercanos al suelo, oscuros, con humedad y materia orgánica, como restos vegetales y raíces, sótanos de casas, grietas de paredes, edificios abandonados, alcantarillas, zonas de basuras, etc.
• Normalmente los flebótomos pican en zonas con poco pelo y alta producción de CO2, como el hocico, alrededor de los ojos, orejas, abdomen, ingles y axilas.

¿Cómo prevenir la picadura del flebótomo?

Ahora que ya lo sabemos todo sobre el flebótomo, su actividad, hábitat y modo de contagio, es importante que sepamos como evitar la picadura de este "mosquito". Te dejamos algunos consejos:

• Evita las horas de mayor actividad del flebótomo. Este insecto es muy activo durante el amanecer, atardecer y primeras horas de la noche. Por lo tanto, recomendamos evitar pasear al perro durante estas horas para prevenir el riesgo de picadura. También evita que tu perro duerma en el exterior, puesto que por la noche puede llegar a recibir más de 100 picaduras de flebótomo, aumentando mucho el riesgo de contraer la leishmaniosis.
• Evita las zonas húmedas. Como hemos comentado anteriormente, el flebótomo se cría en zonas con humedad y materia orgánica, sitios como grietas de paredes o el alcantarillado. ¡Procura evitar estas zonas para reducir el riesgo de picadura del flebótomo en tu peludo!

• Aplica repelentes. Existe una gran variedad de productos para ahuyentar al flebótomo y su picadura, como collares o pipetas. Te recomendamos que acudas a tu veterinario para que te ayude a tomar la mejor decisión en base a las características de tu mascota, el sitio donde vivís o vuestro estilo de vida.

   

No te pierdas nuestro post de Medidas de control para prevenir la leishmaniosis para seguir aprendiendo a prevenir esta enfermedad. ¡La salud de tu peludo es lo más importante!

¡Proteger a nuestros perros es fundamental! Por eso te aconsejamos que visites nuestro post sobre medidas de prevención contra la leishmaniosis. Cualquier duda consulta con tu veterinario/a ¡y a disfrutar a tope juntos! 

¿Crees saber lo suficiente sobre los flebótomos? ¡Pincha aquí para ponerte a prueba!